Hoy quiero contarte un poco sobre ciertos los ejercicios sistemicos y sentimientos exacerbados que no siempre condicen con el momento presente ni con una situación concreta. Se trata de resabios del pasado ancestral al que aún estamos conectados sin saberlo. Las experimentamos porque forman parte de un proceso natural: son emociones que alguna vez ayudaron a nuestros antepasados a adaptarse a un contexto y pasaron como información valiosa a las generaciones siguientes.
¿Sabías que esas emociones excesivas no siempre son del todo nuestras?
Así como una bandada de pájaros sabe naturalmente cómo y hacia dónde migrar cada invierno, la información con la que nacemos también contiene vivencias pasadas que llegan hasta nosotros en la forma de impulsos innatos que intentan «protegernos» de algún peligro o cuidarnos a través de emociones que nos invaden sin explicación.
Esto no quiere decir que cualquier nueva vida repita las historias pasadas. Ni tampoco que la información que se transfirió sea del todo útil. Cada época tiene desafíos diferentes y contextos históricos cambiantes. Si el árbol genealógico creció en el contexto de una guerra o de hambruna, esas vivencias quedan como legado para las generaciones siguientes. Pero si nacemos en otros países, en épocas de paz y abundancia, ¿qué se hace con esa herencia informativa? ¿Cómo se procesa?
En mi paso por la carrera de obstetricia aprendí que un bebé en gestación, además de células, se desarrolla a través de los estímulos que recibe de su ambiente antes de nacer. Los aromas, los sonidos, los alimentos disponibles. Su biología capta esos datos para ayudar a esa vida en formación a subsistir en el entorno en el que será recibida.
Al nacer, entonces, somos el resultado del pasado de nuestros ancestros, del presente al que nos incorporamos y de las experiencias que nos tocará vivir.
La importancia de actualizar emociones a través de ejercicios sistémicos
Cuando accedes a esas sensaciones intensas, exacerbadas o desbordadas, seguramente te estés encontrando con una emoción que toca actualizar o canalizar, y es aquí donde los ejercicios sistémicos resultan una herramienta sumamente poderosa para organizar nuestro legado, quiénes somos y quiénes deseamos ser.
Precisamos echar mano del neocórtex, una parte del cerebro donde suceden los procesos reflexivos, la toma de consciencia, aquello que nos hace humanos, y poder traer a tierra la diferencia entre lo real y lo simbólico.*
Guiando el Sistema: Transformando nuestra narrativa
Guiar ejercicios sistémicos es uno de los temas que más me apasionan de mi trabajo. Porque soy testigo de cómo, luego de acomodar las historias, surgen nuevas posibilidades impensadas, se resuelven nudos que no tenían explicación, se dejan a un costado las mochilas que eran de otros y comienza una nueva etapa de evolución y calidad de vida.
Si algo de esto resuena con lo que te pasa internamente, me encantaría saberlo y que me cuentes cómo crees que el coaching sistémico podrían ayudarte a dar el primer paso.
Hola te he visto en una entrevista en YouTube y me encantaría más información y presupuesto sobre cómo trabajar contigo con descodificación mental. Llevo mucho tiempo que me arreglo las caries y regresan. Todo esto me ha llevado a indagar y darme cuenta debo sanar mis heridas emocionales para ponerle fin a estos problemas y comprometerme con ello. Un abrazo.